Desde hace más de 10 años, su trabajo académico y de incidencia en políticas públicas se ha enfocado en evaluar el desarrollo de habilidades sociales y emocionales a lo largo de la vida en contextos tan diversos como Colombia, el Medio Oriente y los Estados Unidos. Su práctica docente se ha concentrado en la enseñanza de los métodos cuantitativos para las ciencias sociales y la educación.

Como director general, su gestión está orientada en avanzar en la medición de los factores sociales y emocionales que inciden en el aprendizaje holístico de los estudiantes en los diferentes niveles del sistema educativo, y en modelos de evaluación y formativa útil para que las maestras y los maestros puedan ser valorados como el motor fundamental de la educación del país. El ecosistema de evaluación debe alinearse y empujar a un país que esté enfocado en sus aulas de clase y otros espacios educativos.